¿Te has cansado del concepto tradicional de pareja y del amor clásico? ¿Has oído hablar del concepto de relación abierta y del poliamor? Desde la Comisión de Igualdad queremos dar a conocer los diferentes tipos de relaciones no monogámicas que existen. Desde hace años las relaciones están viviendo una completa transformación y se está abriendo camino a vínculos que se salen de la norma: modelos de relación que no tienen exclusividad sexual y/o afectiva

El ser humano es por definición un ser social, con necesidades de afecto e intimidad sexual. A partir de aquí no hay nada escrito, existen numerosas maneras de relacionarnos de forma sexual, romántica y sentimental.En nuestra cultura y en nuestra sociedad se da de una forma casi incuestionable un sistema patriarcal, donde la heteronormatividad aún existe por defecto y en el que el modelo relacional monógamo en todas sus expresiones parece estar bajo ley. Por eso, en este post intentaremos explicar las diferentes alternativas que tenemos a este concepto tradicional de pareja.
 

Una relación monogámica

Para comenzar, definiremos el concepto de relación monogámica al que nos hemos acostumbrado tradicionalmente. Hablaremos de la monogamia como el conjunto de relaciones diádicas, es decir, formadas por dos personas entre las que se establece una relación afectivo y/o sexual.

 

¿Qué son las relaciones no monogámicas?

Por consiguiente, hablaremos de relación no monogámica como toda aquella que permite la interacción sexual, emocional o romántica más allá de las relaciones diádicas exclusivas y excluyentes.

De manera resumida, podemos hablar de los diferentes tipos de relaciones no monogámicas:

Swinger

Es lo que comúnmente se conoce como intercambio de pareja. La principal diferencia de las relaciones swinger con los otros tipos de no monogamia es que en este tipo de relación los miembros de la relación solo pueden tener sexo con alguien nuevo si el otro integrante de la pareja está delante.
 

Pareja liberal

Las relaciones que se definen como liberales son aquellas que no tienen unas reglas establecidas respecto a cómo y cuándo pueden tener sexo con otras personas. Este tipo de pareja conlleva muchas formas distintas de vivir la pareja. Por ejemplo, algunas personas con una relación abierta participan en sexo grupal o intercambios de pareja, mientras que otras solo están abiertas a encuentros casuales si se presentan.
 

No exclusividad sexual o polisexo 

Se trata de las personas que quieren mantener relaciones sexuales de forma consensuada y comunicando a la pareja sus intenciones y acciones. La principal característica es que las relaciones que forman aquellos a quienes les gusta esta categoría tienden a ser casuales. En general, las personas polisexuales consideran que no pueden querer a más de una persona cada vez.
 

Poliamor

El poliamor se distingue del polisexo en el sentido de que quienes lo practican buscan tener varias parejas reales. Así, quien elige el poliamor como su manera de relacionarse se considera capaz de enamorarse de más de una persona. Aquí podemos encontrar varias clasificaciones:

  • Poliamor jerárquico: es un tipo de relación no monógama en la que se tienen varias parejas estables, pero algunas de ellas son más importantes que el resto. La jerarquía se basa en una gestión de privilegios, como el hogar, la familia o el tiempo.
  • Poliamor no jerárquico: es la relación en la que se ama a todas las personas por igual. Esto implicaría que nadie tendría ningún tipo de privilegio sobre las otras personas de la relación múltiple.
  • Anarquía relacional: hay personas que prefieren disfrutar de sus relaciones sin ponerles ningún tipo de etiquetas. Quien practica la anarquía relacional cree que las reglas dentro de una relación solo sirven para enturbiar el vínculo afectivo.

 

¿Y tú? ¿Qué tipo de relación encaja más contigo?

¡Te animamos a compartir tu visión en los comentarios!

Foto de cabecera extraída de IG: merodea
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